Fuente: National Geographic. Dibujos: John Jude Palencar
martes, 29 de abril de 2008
El Mito Maya de la Creación (Colaboración de Hypatia)
Fuente: National Geographic. Dibujos: John Jude Palencar
martes, 22 de abril de 2008
Usen Protector Solar
"Si pudiera ofrecerles sólo un consejo para el futuro, sería éste: Usen protector solar."
Con esta frase comenzaba en 1997 Mary Theresa Schmich un «poema-discurso» llamado Wear Sunscreen (Usa protector solar) en una columna del Chicago Tribune.
"Usa protector solar" ó "Usen protector solar" es un video (con apoyo musical) que ya ha visto mucha gente por la red. El texto original se atribuye a Mary Theresa Schmich una columnista del Chicago Tribune. El breve ensayo se tituló Wear Sunscreen y se publicó en 1997.El ensayo viajó por Internet con un error en el autor, diciendo que el escritor fue Kurt Vonnegut (novelista). Mas tarde Vonnegut resolvió el malentendido en el New York Times diciendo que estaría orgulloso si las palabras del artículo las hubiese escrito el.
La adaptación mas famosa de Wear Sunscreen ha sido la del australiano Baz Luhrmann (productor y director nominado al Oscar entre otras cosas). Luhrmann publicó la canción Everybody's Free (To Wear Sunscreen) donde el ensayo de Schmich es leido palabra por palabra como las publicó la escritora.La canción se convirtió en número uno de muchos países. Schmich dió permiso para hacer la adaptación y recibe a cambio parte del dinero recaudado.
La canción original del videoclip es de la autoría de Baz Luhrmann - Everybody's Free, reversionada más tarde por Rozalla.
Fuente: http://blogs.larioja.com/mimadre/tags/mary-schmich
He aquí todo el texto:
Señores y señoras usen protector solar.
Si pudiera ofrecerles sólo un consejo para el futuro, sería éste: Usen protector solar.
Los científicos han comprobado sus beneficios a largo plazo mientras que los consejos que les voy a dar, no tienen ninguna base fiable y se basan únicamente en mi propia experiencia.
He aquí mis consejos:
Disfruta de la fuerza y belleza de tu juventud.
No me hagas caso. Nunca entenderás la fuerza y belleza de tu juventud hasta que no se haya marchitado.
Pero créeme, dentro de veinte años, cuando en fotos te veas a ti mismo comprenderás, de una forma que no puedes comprender ahora, cuántas posibilidades tenías ante ti y lo guapo que eras en realidad.
No estás tan gordo como imaginas.
No te preocupes por el futuro. O preocúpate sabiendo que preocuparse es tan efectivo como tratar de resolver una ecuación de álgebra masticando chicle.
Lo que sí es cierto es que los problemas que realmente tienen importancia en la vida son aquellos que nunca pasaron por tu mente, de ésos que te sorprenden a las 4 de la tarde de un martes cualquiera.
Todos los días haz algo a lo que temas. Canta.
No juegues con los sentimientos de los demás. No toleres que la gente juegue con los tuyos.
Relájate. No pierdas el tiempo sintiendo celos. A veces se gana y a veces se pierde.
La competencia es larga y, al final, sólo compites contra ti mismo.
Recuerda los elogios que recibas. Olvida los insultos (pero si consigues hacerlo, dime cómo hacerlo).
Guarda tus cartas de amor. Tira las cartas del banco. Estírate. No te sientas culpable si no sabes muy bien qué quieres de la vida.
Las personas más interesantes que he conocido no sabían qué hacer con su vida cuando tenían 22 años. Es más, algunas de las personas que conozco tampoco lo sabían a los 40.
Toma mucho calcio. Cuida tus rodillas sentirás la falta que te hacen cuando te fallen.
Quizá te cases, quizá no. Quizá tengas hijos, quizá no. Quizá te divorcies a los 40, quizá no.
Quizá bailes el vals en tu 75 aniversario de bodas. Hagas lo que hagas no te enorgullezcas ni te critiques demasiado. Optarás por una cosa u otra, como todos los demás.
Disfruta de tu cuerpo. Aprovéchalo de todas las formas que puedas.
No tengas miedo ni te preocupes por lo que piensen los demás porque es el mejor instrumento que jamás tendrás.
Baila, aunque tengas que hacerlo en el salón de tu casa.
Lee las instrucciones aunque no las sigas. No leas revistas de belleza pues para lo único que sirven es para hacerte sentir feo.
Aprende a entender a tus padres. Será tarde cuando ellos ya no estén.
Llévate bien con tus hermanos. Son el mejor vínculo con tu pasado y, probablemente, serán los que te acompañen en el futuro.
Entiende que los amigos vienen y se van pero hay un puñado de ellos que debes conservar con mucho cariño.
Esfuérzate por no desvincularte de algunos lugares y costumbres porque, cuando pase el tiempo, más los necesitarás.
Vive en una ciudad alguna vez pero múdate antes de que te endurezcas.
Vive en un pueblo alguna vez pero múdate antes de que te ablandes.
Viaja. Acepta algunas verdades ineludibles: los precios siempre subirán, los políticos siempre mentirán y tú también envejecerás.
Y, cuando seas viejo, añorarás los tiempos en que eras joven: los precios eran razonables, los políticos eran honestos y los niños respetaban a los mayores.
Respeta a los mayores. No esperes que nadie te mantenga pues tal vez recibas una herencia o, tal vez te cases con alguien rico pero, nunca sabrás cuánto durará.
No te hagas demasiadas cosas en el pelo porque cuando tengas 40 años parecerá el de alguien de 85.
Sé cauto con los consejos que recibes y ten paciencia con quienes te los dan. Los consejos son una forma de nostalgia.
Dar consejos es una forma de sacar el pasado del cubo de la basura, limpiarlo, ocultar las partes feas y reciclarlo dándole más valor del que tiene.
Pero hazme caso en lo del protector solar.
sábado, 19 de abril de 2008
Las Ferias de Xalapa (Tercera y última parte)
Ejemplos de tales actividades fueron: la Expo-Flor Xalapa '92 (del 19 al 30 de abril) cuyo propósito fue mostrar las diferentes especies de flores cultivadas en la región desde hace mucho tiempo. En el mes de julio, del 17 al 26, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, a través de la Secretaría de Educación y Cultura, organizó la Tercera Feria Nacional del Libro Infantil y Juvenil Xalapa '92. Por su parte, el Festival de la Cultura Xalapa '92, del 9 al 18 de octubre, tuvo como objetivo reafirmar la tradición de ciudad culta de nuestra capital y alcanzó presencia internacional con la asistencia de más de diez países.
Del 29 de octubre al 2 de noviembre de 1992 se efectuó la Muestra de Altares de Muertos con el fin de preservar las raíces, la cultura y las tradiciones propias de Xalapa y sus alrededores. Del 16 de diciembre de 1992 al 6 de enero de 1993 se llevó a cabo el Festival de Navidad y Reyes con el objetivo de fomentar la tradición de ramas, cánticos, nacimientos y reyes en la ciudad y las poblaciones circunvecinas.
Desde 1992 hasta la fecha el Ayuntamiento y algunos grupos de la iniciativa privada han realizado esfuerzos importantes por mantener viva la tradición de las ferias en la ciudad; de hecho, las actividades de las ferias ya efectuadas han ido puliendo los detalles de organización y realización para presentar un espectáculo de mayor calidad para los turistas nacionales y extranjeros.
martes, 15 de abril de 2008
Un Comentario Muy Especial
FRANCISCO JAVIER dijo...
QUIERO DARLES LAS GRACIAS AL GRUPO DE
"TU XALAPA",POR ACORDARSE DE ESTE MARAVILLOSO GRUPO,RESULTA QUE MI PAPA ES EL
DEL sOMBRERO, EL DE LA TROMPETA, DIRECTOR Y FUNDADOR DEL GRUPO DE LOS XOCHIMILCAS.RECIBAN UN ABRAZO Y MI AGRADECIMIENTO POR PONER SU MUSICA AL ALCANCE DE TODOS. SINCERAMENTE:
FRANCISCO J. ARMENTA VINCENT
13 de abril de 2008 02:55 AMhttp://tuxalapa.blogspot.com/2007/10/los-xochimilcas-26-xitos-boogie-swing-y.html
http://tuxalapa.blogspot.com/2007/09/los-xochimilcas-edicin-especial.html
Las Ferias de Xalapa (Segunda Parte)
La mercancía de las ferias venía por cuenta del rey o de los particulares y estaba compuesta por diversos objetos de ferretería como yunques, hierro (en barras o labrado), sierras, formones, limas, picos, martillos, cuchillos y hojalata; mercería y lencería como: tijeras, peines, botones, bramante, velillos, crespones, lienzos de Flandez, tafetanes, olanes, bordados, cintería de seda y raso; comestibles, entre los que había pasas, alcaparras, sardinas, jamones, chorizos y vinagres, al igual que licores y vinos; objetos de lujo como azulejos de Talavera, jabones, agua de olor y de colonia o medias y calzas de punto; así como papel, algunos libros y armas.
Los productos nacionales que se exportaban en esa época eran: grana o cochinilla, henequén, palo de Campeche, vainilla, azúcar, cacao, chocolate, añil, sarapes, especias y plata y oro en barras y en monedas de diferente denominación.
El auge económico alcanzado a raíz de las ferias motivó a los orizabeños a solicitar una concesión para efectuar un evento similar; el permiso fue concedido por Felipe IV en 1725, pero no tuvo el mismo éxito porque la mayoría de los comerciantes porteños ya se habían establecido en Xalapa, sobre todo porque así querían evitar el "vómito negro" (o fiebre amarilla) y las "fiebres tercianas" (malaria) del puerto.
En 1778 el rey Carlos III expidió el Reglamento y Arancel Libre entre España y sus colonias; esto trajo como consecuencias la suspensión de las ferias en Xalapa y el debilitamiento económico de la región. Los lugareños se habían acostumbrado a las ferias y descuidaron la agricultura y la ganadería; incluso, gran parte de la población había cambiado sus costumbres, su pensamiento e indumentaria al estilo europeo. Frente a este panorama, los habitantes de la región tuvieron que reorganizar su actividad económica y buscar otras alternativas de progreso.
miércoles, 9 de abril de 2008
Las Ferias de Xalapa (Primera Parte)
En el siglo XVIII las más importantes eran las de Xalapa, Acapulco, San Juan de los lagos, Saltillo y Chihuahua. Estas ferias duraban varios meses, pero la principal era la de Xalapa, hecho por el cual fue conocida comoXalapa de la Feria.
La prosperidad creciente que tuvo el comercio desde los primeros tiempos de la conquista benefició e hizo crecer a Xalapa; en este lugar se detenían los conductores de cargas y algunos comerciantes del puerto ya comenzaban a construir aquí sus casas para librarse de las estaciones más calurosas de la costa.
Gran número de mestizos e indios se empleaban en conducir los millares de mulas que en largas recuas cubrían el camino de México, Perote y Veracruz, alimentando el tráfico a todos los puntos intermedios.
Las ferias propiciadas por el Consulado de México se efectuaban desde hacía mucho tiempo en la capital hasta que Baltazar de Zúñiga, trigésimo sexto virrey de la Nueva España, dispuso que a partir de 1720 las ferias se realizaran en Xalapa. Para entonces Xalapa contaba con siete mil habitantes (la mayor parte, indígenas), pero con el inicio de las ferias la población aumentó; incluso, muchos españoles que venían en las flotas se quedaron a vivir en Xalapa y establecieron sus comercios.
Se construyeron casas, bodegas, almacenes, y poco a poco los barrios de San José, El Calvario y Santiago se unieron con el barrio de San Francisco (centro de la población). Las ferias se celebraban en la Plaza de la Constitución, antigua Plaza del Rey (actual mercado Jaúregui); en este lugar también se efectuaron las "juras", es decir, las ceremonias protocolarias para el reconocimiento del rey en turno o la recepción de algún virrey o enviado especial de la Corte.
Las ferias no se celebraban regularmente, dependían del arribo de las flotas mercantes al puerto de Veracruz. La primera se realizó en 1720 con las mercancías transportadas en la flota que comandaba Fernando Chacón y la última ocurrió en 1776 con la llegada de la flota de Antonio de Ulloa; pero, cabe señalar que entre 1736 Y 1749 se interrumpió la llegada de las flotas a causa de la guerra entre España e Inglaterra.